UNIVERSIDAD TECNOLOGICA EQUINOCCIAL
Michelle Arias, Carolina Galarza y Karina López
Técnicas de manejo para un títere
Lo primero que debemos tener en cuenta es el manejo básico del muñeco: utilizamos el dedo índice para la cabeza, el pulgar y mayor para los brazos y los dos dedos restantes se doblan sobre la palma.
Entramos o salimos de escena siempre por los costados, tratando de no superponer los movimientos con otros títeres que se encuentren en escena.
Otra posición de manejo es la modalidad catalana: se utiliza el meñique y pulgar para los brazos y el resto de los dedos para la cabeza.
La posición menos cansadora para sostener el títere es la que mantiene el brazo en forma vertical, pero todo dependerá del espacio físico con que se cuente y de las condiciones en que se montará el espectáculo.
Antes de comenzar a manipular el títere es conveniente realizar los siguientes ejercicios previos:
Con los brazos en alto, mover los dedos. Hacer que bailen las manos, acompañándonos con música. Luego, rotar la mano, haciendo mover nuestra muñeca. Así girará la cintura del títere. Levantar el brazo derecho y luego el izquierdo. Ejercitar las posiciones de las manos para los movimientos de cabeza y brazos de los muñecos- con cilindros de cartulina.
Empleo de la voz
La voz es un elemento fundamental para dar vida al muñeco. El tono de voz tiene que ser alto pero no debemos gritar, ya que esto deformaría nuestra voz y le restaría claridad.
La voz acompaña los movimientos del títere y sus ademanes, para lograr mayor énfasis y lograr una unicidad en los recursos. Adecuaremos la voz al personaje que represente cada títere y mantendremos el mismo registro y timbre durante toda la obra. Tenemos que lograr naturalidad en nuestras modulaciones, de no ser así, es preferible adoptar un registro lo más parecido al nuestro, de modo de sentirnos cómodos y no alterarlo durante toda la representación.
Aconsejamos realizar los siguientes ejercicios preparatorios para. lograr un tono de voz adecuado:
inspirar profundamente y guardar el aire todo el tiempo que se pueda expirar lentamente hasta vaciar los pulmones levantar la voz en escala ascendente hasta 20 y luego descendente, de 20 a 1. Escucharse y articular, separando correctamente las palabras, Es conveniente gravar nuestra voz para luego escucharla y tomar conciencia de nuestras modulaciones. inventar voces de acuerdo a los diferentes personajes representados (un león, una oveja, un gigante o un enano, un anciano o un niño, etc.)